lunes, 28 de noviembre de 2011

Mi tercera mariposa - Rocío Enara


Sé que me he portado fatal, que no he entrado hace mucho al blog y por supuesto, lo peor es que no os he presentado a Rocío... que ya está aquí desde el día 11 de Noviembre.

No he tenido mucho tiempo para entrar en el blog, y para colmo si bien Rocío es una niñita sana, hemos ido y vuelto de la clínica un montón de veces, una porque le dio ictericia, la bilirrubina estaba en 19.38 cuando los niveles normales debieran ser entre 0,5 a 1,5... y lo otro porque suponemos que de tanto llevarla a la clínica, al final ha terminado por estar resfriada...

Pero vamos al día D... ingresamos en la clínica a las 15:00 horas, llevaba sin comer desde las 11:00 porque era segura la cesárea. El pabellón estaba reservado para las 19:30 pero como viene siendo habitual en mis partos, o los médicos se equivocan de clínica, o no encuentran aparcamiento o como en este caso, había partido y el tráfico estaba imposible... ¿¿¿conclusión???... yo con contracciones y ni hablar de entrar a quirófano a la hora prevista...
En todo caso no fue tan tarde y Rocío nació a las 20:25.
Pesó 2.640 y midió 48.5... lo sé, lo sé... era pequeñita, pero yo no he tenido niños grandes, Diego que fue el que más pesó lo hizo con 3.013... así que Rocío siguió con la norma.

Yo pasé una noche de locos, el dolor no me dejó dormir y a las 4 de la mañana pedí que por favor que me dieran algo... y no me hizo efecto, así que aguanté como pude y a las ocho de la mañana me pincharon otra vez... por suerte se pasó el dolor porque con la niña en la habitación y el dichoso dolor, hubiera sido imposible disfrutarla. Yo no estuve en la habitación ni con Sofía ni con Diego porque los dos tuvieron que permanecer en la UTI, así que tenía unas ganas locas de que Rocío pasara desde el principio conmigo...

Y el lunes por la mañana nos dieron el alta... más feliz que una perdiz llegué a casa con mi peque en brazos.

Sofía y Diego fascinados con la niña, sobre todo Sofía que parece una mami en miniatura, quiere tenerla en brazos, peinarla, vestirla, pero tenerla en brazos es lo que más le gusta. Diego creo que ha sentido un poquito la competencia, y a pesar de que le da muchísimos besos y la tiene en brazos, no está tan preocupado de ella como Sofía.

Claro que esto es el principio, aún es muy pequeñita y además es buenísima, no se queja nada y hay que despertarla para comer. Por las noches tengo que poner despertador para darla de comer porque ella no se despierta y si por casualidad lo hiciera ni siquiera llora, como mucho un leve quejido y se acaba. Lo que menos le gusta es el cambio de pañal y tampoco es que haga escándalo... lo que no sé es si quiere pasar desapercibida para que sus hermanos no la molesten o es que es así de buena la pobre...

Hoy ha estado con un poquito de fiebre por el resfriado, así que ha estado un poquito más mañosa... pero sé que no es lo habitual, así que no desespero.

Voy a ver si me pongo al día con vuestros blogs... pero dadme tiempo que ahora de eso es lo que me falta!!.