miércoles, 8 de febrero de 2012

Gracias


A todos y cada uno de vosotros por vuestros mensajes en la entrada anterior.

Como familia hemos pasado dos años complicados, el terremoto, el cáncer de Diego, la muerte de mi abuelo y ahora el despido de mi marido.

Decidí abrir este blog pensando que nadie lo leería, que sería una especie de diario en el que podría contar como estaba y cómo me sentía... que algún día volvería a leerlo y recordar lo vivido y punto.
En cambio me encontré con personas maravillosas que vivían más o menos lo mismo que yo, maternidad, lactancia, quebraderos de cabeza, embarazos, enfermedades... y que además me daban aliento cuando me hacía falta, muestras de cariño en los momentos que más los necesitaba, humor cuando no tenía ganas de sonreír y esperanza...

Y esas personas sois vosotras y es a vosotras y por vosotras que vuelvo a decir: Gracias!.

Gracias por visitarnos en este pequeño rincón...
Gracias por leernos.
Gracias por vuestros ánimos.
Gracias por vuestros momentos.
Gracias por vuestras palabras.
Gracias por vuestra risa...

Después de mucho pensar los pro y los contra, hemos decidido irnos definitivamente a España... lo sé, sé que allí las cosas no están del todo bien, que encontrar trabajo, sobre todo mi marido, va a ser difícil, pero al menos allí estaré acompañada de mi familia, que hasta ahora me ha hecho mucha falta.
Sé que mi familia me va a apoyar mucho y además tenemos un piso a nuestra disposición por lo menos nos servirá para comenzar.
Hemos matriculado a los niños en los colegios más cercanos a la espera de ver cual nos toca y aún sabiendo que no habrá ingresos o serán muy pocos, también es cierto que gastaremos menos...

Aún no hemos decidido qué hacer con la casa si venderla o alquilarla... y aquí nuestros sentimientos encontrados...
Desde que llegué a Chile soñaba con volver a España, y ahora que por fin vamos a hacerlo, me da pena dejar mi casa, las cosas que poco a poco hemos ido comprando... nosotros empezamos la casa por el tejado, empezamos a vivir juntos con una cama prestada y una caja de frutas que hacía de mesa, el sofá eran dos cojines en el suelo y éramos igualmente felices...

Ahora dejamos una casa llena de sueños, planes, proyectos... la casa que recibió a nuestros hijos al momento de nacer... amueblada por fin, con cosas por hacer todavía... con una lavadora recién comprada, jajaja!... Y me da pena!!

Siento que por más que me haya quejado aquí, Chile seguirá de alguna manera en mi corazón, no en vano han sido 11 años... es el país donde han nacido mis hijos, donde me casé, donde he aprendido a madurar, a vivir por mi cuenta, donde aprendí a valerme por mi misma...

Llevamos unos días bastante tristes... sabemos que la situación es difícil, pero esperamos salir de esta...

Así que en Junio... nos vemos por Bilbao!!